jueves, 27 de noviembre de 2008

La poeta del pantalón- falda y corbata que va en bici por Madrid.





Leyendo la prensa me he enterado de que hoy hace una década que murió Gloria Fuertes. Hubo una época en la que fue una poeta muy popular, en parte debido a que fue "popularizada" por la televisión. Fue poeta ( he leído que no le gustaba la palabra poetisa), entendiendo como tal, no sólo a quien escribe poesía, si no a quien su vida es la poesía. El premio nobel Camilo José Cela dijo de ella: "Angélica y alta voz poética a la que los hombres y las circunstancias putearon inmisericordiosamente". Supongo que con ello se refería a ese trasfondo triste, de díficil y dura vida que escondía Gloria Fuertes tras una amplia sonrisa, mientras recitaba poemas aparentemente simples y sencillos, que encerraban frecuentemente , sin embargo, un profundo sentido, y que no eran en absoluto tan simples ni sencillos de escribir.

Yo la relaciono con programas infantiles de los 70 como "Un globo, dos globos, tres globos" o " La cometa blanca". Quizá os pasé como a mí, cuando intento recordar algo de estos programas, lo que primero que me viene a la memoria, honestamente tengo que reconocerlo, son las canciones de cabecera que tal vez podría tararear e incluso cantar porque algo recuerdo de las letras. Y seguidamente, me vienen a la memoria, las lecturas de poemas para niños que Gloria Fuertes hacía. En realidad, era muy pequeña, y no la recuerdo exactamente integrando el programa, he sabido después que ella colaboraba activamente en esos programas, por eso me imagino que era así, y por ello aúno ambos recuerdos. Estas presencias televisivas la hicieron muy popular, por su particular forma de expresarse, en parte también, porque sorprendía que de una voz tan ronca salieran poemas tan lúdicos y coloristas. Los cómicos Martes y Trece, se percataron de su particular estilo y la parodiaron. La imitación de Millán Salcedo la convirtió en una persona aún más conocida, y también querida, pues se notaba que era una parodia hecha con cariño, el mismo que ella despertaba en todos.

Pero Gloria Fuertes ya tenía para entonces un largo camino recorrido. Madrileña de Lavapiés, procedía de familia numerosa y humilde. Se matriculó en el Insituto de Educación Profesional de la Mujer, donde se daba formación en las "tareas típicamente femeninas" tal y como se concebían en la época, y que le permitió obtener entre otros, los diplomas de Mecanogría-Taquigrafía y Gramática-Literatura. Los primeros le sirvieron para poder ganarse la vida durante mucho tiempo en, como decía ella, "horribles oficinas". La Guerra Civil la marcaría para siempre. Jugó al despiste sobre su vida privada que preservó celosamente. Paralelamente a todo esto, hubo una constante en su vida: escribir poesía. Se dice que con 5 años ya contaba y dibujaba sus propios cuentos. A los 15 escribía poesía y a los 17 la recitaba en al radio. Aunque su primer libro "Isla Ignorada" no se publicó hasta 1950, toda la vida escribió y nunca dejó de escribir. Se conoce como "la poeta de los niños", y con razón, pues buena parte de su bibliografía es literatura infantil, pero también escribió bastante poesía para adultos.

Literariamente se la señala como integrante del Postismo, un movimiento literario de posguerra, que surgió en torno a mediados de los años 40, y del que entró de la mano de uno de sus principales fundadores, Carlos Edmundo de Ory. Este movimiento, en realidad era una síntesis de otros cuatro "ismos" literarios: expresionismo, futurismo, dadaísmo y surrealismo. Su finalidad era, en medio de una sociedad gris y triste como era la de postguerra, introducir en la poesía, la exaltación de la imaginación, un sentido rítmico, y lúdico, sin prejuicios ni convencionalismos.

Hoy he leído muchas cosas sobre ella, pero me ha llamado la atención una. Resulta que le gustaba ir por Madrid, montada en su bicicleta, ataviada con su pantalón falda y su corbata. Me habría gustado haber podido poner una foto de ella así, para ilustrar este recordatorio que hoy le quiero hacer desde mi nebulosa con este post, pero no la he encontrado.





Aunque no nos muriéramos al morirnos,
le va bien a ese trance la palabra: Muerte.

Muerte es que no nos miren los que amamos,
muerte es quedarse solo, mudo y quieto
y no poder gritar que sigues vivo.


( "Aunque nos muriéramos al morirnos" Gloria Fuertes)

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